Los menores indígenas quienes sobrevivieron a la desconocida selva del Guaviare, llevan un mes de estar en las instalaciones en el Hospital Militar, donde se les ha prestado todos los servicios de salud para una evolución satisfactoria.
Gracias al trabajo del médico interdisciplinario los menores se encuentran recuperados y su familia comenta un poco de lo vivido. «Ya ellos están bien. Estoy muy contenta, ya ellos me hablan. Los niños, me saludan. La pequeñita quiere que la cargue. Ya falta poco para que sean dados de alta», comentó Fátima Mucutuy, abuela materna.
Desde la familia, se solicita al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), que los menores queden bajo el cuidado y protección de ellos. La familia Mucutuy está en el proceso de construcción de una casa para poder brindarle a los menores una vida digna y un ambiente sano para cada uno.
La abuela materna señaló «Ya estamos construyendo la casa en mi resguardo. Los niños quieren quedarse conmigo. Cuando la mamá vivía, ellos se quedaban hasta un mes conmigo. Los niños me dicen: «Nosotros queremos quedarnos con usted, cuando nos lleva»
El padre de los dos menores pequeños, Miller Manuel Ranoque, no ha vuelto a visitar a los niños al Hospital Militar, como lo hacía anteriormente.
Para finalizar, doña Fátima, también comentó que, los menores jamás estuvieron bajo el poder de algún grupo al margen de la ley, como se había mencionado anteriormente. En la ‘Operación Milagro’ participaron más de 350 personas que tenían la fé y la esperanza de hallarlos con vida, quienes recorrieron más de 2.600 kilómetros en la búsqueda de los menores